EL GÉNERO DE LA ROPA: UNIFORMES DISCRIMINATORIOS
Abril de 2024. Pleno Siglo XXI. Pensamos que hemos avanzado muchísimo y que quedan pocas cosas por reclamar en el ámbito de la igualdad, pero no es cierto. Cada uno se engaña como quiere supongo, pero es nuestra elección y nuestro deber saber identificar las injusticias y dejar a nuestros hijos un mundo mejor.
Imagina tener que trabajar 14 horas de pie como
azafata y estar obligada a hacerlo subida encima de unos tacones, acumulando
rozaduras y heridas jornada tras jornada. ¿Y todo esto por qué? Por el simple
hecho de ser mujer, de tener que vestir acorde a los roles de género establecidos:
elegancia, feminidad, delicadeza. Los valores que supuestamente debe transmitir
la mujer.
En esta ocasión reflexiono solo sobre un par de
noticias, pero si buscamos en Google nos saldrán cientos. Cientos de casos de
mujeres trabajadoras que denuncian, como es el caso de las azafatas de Ryanair
(https://www.publico.es/sociedad/union-sindical-obrera-denuncia-ryanair.html),
tener que vestir con falda y tacones y no poder optar por usar pantalón, como
sí hacen sus compañeros hombres.
Una situación similar se produce en los
colegios, donde en muchas ocasiones se obliga a las niñas a ir en falda, de
determinada longitud y con unas características concretas, mientras que los
niños pueden ir en pantalón, siendo este más cómodo para jugar y realizar
actividades propias de niños, donde no se debería hacer distinción entre
hombres y mujeres (https://www.heraldo.es/noticias/sociedad/2023/09/01/uniforme-escolar-comunidad-educativa-discriminaciones-estereotipos-sexistas-1675159.html).
En mi opinión, esta vestimenta induce a que las niñas deban quedarse sentadas
jugando tranquilas, mientras que a los niños les da la libertad de tirarse por
el suelo y no ser tan comedidos.
Se trata, sin lugar a dudas, de un caso de
discriminación indirecta, entendida esta como toda disposición, criterio o
práctica aparentemente neutros que ocasiona o puede ocasionar a una o varias
personas una desventaja particular con respecto a otras.
En concreto, sería una discriminación de
carácter sexual, aunque también social, al hacer una distinción entre hombres y
mujeres, y en principio oculta, puesto que cuando se esconden las motivaciones
discriminatorias fundamentando la decisión en otros motivos de carácter neutro.
¿Cuál es la solución? ¿Qué podemos hacer al
respecto? La respuesta es muy simple y compleja a la vez. Tenemos que levantar
la voz, no mirar para otro lado, denunciarlo, movilizarnos y unir fuerzas,
entre mujeres pero también con el apoyo de los hombres, que también deberían
poder elegir entre el uniforme de pantalón y el de falda.
Lamentablemente, la ropa sí tiene género,
aunque no debería, es una realidad. La ropa debería ser una herramienta de
expresión y de libertad de cada persona, independientemente de que estas se
sientan hombres, mujeres o no se identifiquen con dicho binomio.
Otra herramienta son los Planes de Igualdad, ya
que desde que se estableció la obligación de determinadas empresas de elaborar
e implantar estos planes, suele ser una práctica habitual incluir como medida los
uniformes sean los mismos para mujeres y para hombres, quedando a la exclusiva
voluntad de la trabajadora optar por pantalón o falda.
En el mismo sentido, los planes de igualdad
deberían contemplar que la uniformidad se adapte a la anatomía y morfología
femeninas. Esta ha sido una reivindicación tradicional de ciertos colectivos,
como el de las mujeres miembros de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad que demandan
chalecos antibalas ajustados a su anatomía, o el de las pilotos de helicópteros
que intervienen en emergencias y aviones de combate que piden monos adaptados a
su talla, a su anatomía y a sus necesidades fisiológicas (https://theobjective.com/espana/2023-03-08/mujeres-policia-chaleco-femenino).
En este último caso la situación es de especial
relevancia, ya que se pone en riesgo la vida de las mujeres en los citados
cuerpos. El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha denunciado que hasta la
fecha se han repartido un total de 3.380 chalecos antibalas femeninos para las
11.824 mujeres del Cuerpo, lo que supone que un 72% de ellas no dispone de uno.
BIBLIOGRAFÍA
https://www.publico.es/sociedad/union-sindical-obrera-denuncia-ryanair.html
https://theobjective.com/espana/2023-03-08/mujeres-policia-chaleco-femenino
https://www.diariosur.es/20081211/sociedad/enfermeras-obligadas-vestir-falda-200812111545.html
https://www.expansion.com/2008/12/12/mujer-empresa/1229070651.html
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